¿Crees que los copywriters encontramos la creatividad tirados en el sofá o mirando cómo la luz entra por la ventana? No, amig@, ojalá fuese así de fácil.
El trabajo del copywriter se basa en una metodología más que en la imaginación. Sí, está todo estudiado, así que si no conoces la técnica o tienes un mal día, no es difícil cometer algunos de los errores más frecuentes en copys.
Un error en un copy puede echar por alto toda la reputación de tu marca o empresa y hacer que no consigas tus objetivos de conversión. Pero somos humanos, trabajamos a mil por hora y es fácil tener un desliz. No hay que fustigarnos porque de los errores se aprende. Como dice el sabio refranero español: “cometer un error y no corregirlo, es un error mayor”
¿Quieres conocer cuáles son los errores más frecuentes en la redacción de publicaciones en redes sociales? ¿y la herramienta que te ayudará a mejorar tus copys? ¡Sigue leyendo!
5 ERRORES EN COPYS QUE PUEDEN FASTIDIAR MUCHO TU ESTRATEGIA
- No dirigirte a tu público objetivo
¿Quién quieres que reciba tu mensaje y haga ‘clic’ en su cabeza? Si eres de las personas que piensa que cuanto más genérico sea el copy a más personas alcanzará, tu planteamiento hace aguas.
Tu producto/servicio marcará el target, y este, a su vez, tu mensaje. Pongamos un ejemplo muy claro. Si tu empresa se dedica a vender productos de higiene femenina, ¿redactarías tu mensaje aludiendo a todos los seres del planeta? No tiene mucho sentido, ¿verdad? Aquí lo ideal será hablarle a “ellas” y, concretamente, a “ella”, porque otro de los errores comunes en la redacción de copys es creer que hay cientos de personas detrás de cada pantalla de móvil. Así, lo ideal es que utilices la segunda persona del singular. Hablar de tú a tú establece una conexión inmediata con tu audiencia y fomenta la comunicación entre ambas partes. Generarás cercanía y humanizarás tu marca.
¡Ahora bien! Sin salirnos de este contexto. Resulta que tu público objetivo mayoritariamente son mujeres, pero habrá ciertos momentos que necesitarás que tu mensaje llegue al máximo número de personas posibles. Aquí sí: ¡bienvenidos mensajes abiertos!
- Usar un tono de voz incorrecto
Este punto va muy ligado al primero, y casi igual de importante. ¿Le hablarías con un registro muy formal a un veinteañero? Aunque en la mayoría de los casos se use un lenguaje más coloquial y de tú a tú, dado que las redes sociales buscan “conectar” y acercarse al público, en determinadas ocasiones lo ideal es no colarse con el “colegueo”. Imagina que trabajas en una empresa de servicios funerarios, ¿crees que funcionaría bien un tono muy coloquial?
Sea cual sea el tono que utilices, mantenlo en todas las comunicaciones que haga tu marca. De nada sirve un “¡Hey! ¿Cómo te va?” en Facebook, si luego apareces en una newsletter con un “ Estimado Juan, ¿qué tal se encuentra?”.
- Cantidad sin calidad
Los expertos los llaman infoxicación digital. Estamos saturados de mensajes y nuestro cerebro está más que harto de procesar tanto estímulo y de leer parrafadas. Así que si no quieres aburrir al personal, mejor que te esmeres y crees un copy corto y al grano, pero sin dejarte nada importante en el tintero. Efectivamente. Esta es la parte más difícil de un copy en redes sociales: captar la atención en pocas palabras.
Preguntas abiertas, apelación a los deseos o miedos, frases con doble sentido… Aquí sí que hay que echar mano a la creatividad, y tus salvavidas serán la imagen o vídeo que acompañe al texto porque lo reforzarán o le darán sentido.
- Alimentar tu ego
“No me digas lo bien que lo haces; dime lo bueno que me hace cuando lo utilizo” [Leo Burnett]
“Deja tu pelo en manos de la mejor peluquería de Granada” Ñiñi-ñi-ñi-ñiñi-ñiiii… De verdad. No hables solo de ti, de tu marca, de lo bien que lo haces todo y de que eres el super-top-numer-one de todos los tiempos. Los copys repelentes y egocéntricos no generan simpatía. Céntrate en vender los beneficios que tu producto o servicio generarán en tu cliente ideal, en lugar de hablar y hablar de las características. Dale la vuelta a la tortilla y cuenta qué ofreces con clase. Y no te olvides de darle información de valor, cuanta más mejor, porque las redes sociales están concebidas más para fidelizar que para vender. ¡No lo olvides!
- No usar una llamada a la acción
¿Qué finalidad tiene tu mensaje en redes? ¿Invitar a comprar? ¿Hacer una reserva en tu restaurante? ¿Visitar tu blog? Siempre hay que escribir con una finalidad en mente, y tienes que conducir a tu destinatario a ese objetivo. Las llamadas a la acción pueden ser botones visibles, pero remárcalo en el texto. “Haz clic aquí y empieza tu viaje” “¡Quedan pocas plazas! Reserva ahora.” Puedes usar emoticonos como flechas o dedos señalando para dirigir la mirada del lector. Pónselo fácil.
¿Crees que estos consejos te ayudarán a no cometer errores a la hora de crear copys para las redes sociales o ya los tienes dominados? Si te han parecido útiles, dale amor a esta publicación y volveremos pronto por aquí con otro puñado de recomendaciones.
¡Ah! ¡Espera, espera! Que te había dicho antes que te iba a dejar una herramienta útil para redactar copys y no quiero faltar a mi palabra. Además de probar, probar y probar, la clave para acertar con tus mensajes, te recomiendo utilizar herramientas como los test A/B.
El A/B testing consiste sencillamente en probar dos variantes de algún elemento de nuestro marketing, comparar su funcionamiento para sacar conclusiones y aplicar los resultados. Los amigos de HootSuite te lo cuentan aquí.
¡Te espero en el próximo artículo!
Ángela Gómez – Responsable de contenidos de Terceto Comunicación